Rosas color muerte

En mi cuarto

te vi, desnuda, insomne

lúgubre como la noche, tenias el corazón

y la voz en tus manos.

"¿Puedo tomarlo?", pregunté.

"No, porque está roto, destruido y lastimado", respondió,

"Y porque no es mio"

Comentarios

Entradas populares de este blog

Sin fotos

Ojitos de Gorrión

Vamos